Tolerancia
(del latín tolerantia). F. 2. Respeto a
las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias
a la propia.
En estos
últimos días he visto una falta de tolerancia bastante grande; entiendo que se
deba a la situación del país. La tensión de estos últimos días hace que los
ánimos estén en ebullición.
Yo también
he pecado de intolerante; mi blog, testigo de los cambios en mi carácter, da fe
de ello. Muchas veces, estando cansada y decepcionada, he sido intolerante con
el pensamiento ajeno. Por suerte ahora, en un momento de calma, me doy cuenta
de que los venezolanos necesitamos una dosis de tolerancia.
Como están
diciendo todos: antes de ser de oposición o chavistas, de ser adecos o
copeyanos, antes de todo eso: somos venezolanos.
Una prueba
de la intolerancia, de ambas partes, son esos dos últimos comentarios de odio
hacia mi persona. Pretendiendo insultarme me insinuaron que soy homosexual
(argumento que no anula mis reflexiones; además de que no es un insulto, es una
sexualidad) y dijeron que soy puta.
Me parece
triste que yo me tome el tiempo de escribir y redactar correctamente una
reflexión de mi parte, cosa que no se hace en cinco minutos, y alguien que quiere “rebatirlas” pretenda
hacerla por medio de “insultos” mal escritos.
Si tienes
un argumento para debatir con mi persona, estaré muy feliz de recibirlo y de
discutirlo. Yo creo en la libertad que tenemos todos de expresarnos, pero no
veo necesario que en mi propio espacio
de expresión me insulten.
Tolerancia
amigos; porque Venezuela es una república.
Respiren
profundo, amigos. Sin la diversidad que hay en el mundo, no podrían surgir
nuevas ideas. El cambio es bueno, pero para que haya cambio: debe haber
tolerancia. Tenemos que dar el ejemplo, por medio del respeto y la solemnidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Como soy fiel creyente de la libertad de expresión, puedes dejar tus opiniones de mis entradas en un comentario.