sábado, 27 de octubre de 2012

Ayer fui a la FILUC.
Realmente me pareció bastante aceptable la feria; no somos un país con cultura de libros y esas personas hace eventos hasta donde puede para su público lamentablemente corto.
En la ponencia a la cual pude asistir hablaron del "Lugar del lector".

Me pareció sumamente interesante ese cuadro de dialogo divagador en el que se establecieron todas las intervenciones; fueron claros pero no precisos en el tema central y, para mí, eso es algo maravilloso: demuestra la cantidad de cosas que tienes para decir de un tema.
Personalmente me parecieron todos muy agradables; iban desde el escritor de trabajo con un poco de ego pero más bien simpático, junto a una señora super dulce que seguramente tiene un dominio muy lindo de la prosa, seguido de un hombre casi pisando los treinta con una intelectualidad bastante humilde (y con una personalidad fresca) hasta el escritor típico del mito bohemio, para el cual escribir es el masoquismo más grande que puede pagarse.
Personalmente me encanta relacionarme con escritores, poetas y demás. No importa si no son de oficio; aunque francamente, mejor si es así, la experiencia ajena se hace propia,

En definitiva, me gustó.
Todas las intervenciones fueron interesantes y creo que encontré en ese sitio muchas opiniones bastante interesantes.

En conclusión; creo que a la FILUC y sus ponencias merecen una oportunidad.
Recomiendo a todos los carabobeños su asistencia.

P.D: Hay un stand de libros que tiene una oferta de cuatro libros por doscientos bolívares si pagas en efectivo. Muchos se encuentran hasta sellados y hay de muy buenas editoriales.

domingo, 7 de octubre de 2012


A todas aquellas personas que demostraron un oportunismo inigualable, que dejaron vender su tierra por un fajo de billetes o una promesa vacía…
A ustedes, los destructores de mi futuro, de su futuro…
Solo puedo decirles que siento un profundo desprecio por ustedes, por su falta de valores y por su maldita ignorancia.
Para mí se acabó la tolerancia; pero jamás la lucha, ¡mi Venezuela será libre, lo sé!

viernes, 5 de octubre de 2012


Ella era como la alegre yerbabuena,
que crecía en el apartado del verde bosque;
 tenía nombre de princesa
                                  y de flor…


Sutil amiga de los suaves cantos de sirena.
Ella hacía de su vientre un lago perfumado
para que hasta en el agua se pudiese florecer.


Entre sus suaves senos
se podía apreciar como florecían los cerezos
y hasta en sus cabellos dorados
se apreciaba el regalo de la abundancia.


Sí, ella era como un susurro,
podía llenarte el alma.
Era la más suave de las visitas,
una canción llena de esperanza.


Ella era como la alegre yerbabuena,
que crecía en el apartado del verde bosque;
 tenía nombre de princesa
                                  y de flor…